una cuna
Me ha quedado una cuna
como una isla
prendida en el oleaje
de una làgrima
y le vino que me bebe
en el deseo de ahogarme
y el silencio que muerde
la humedad de mi carne.
Me ha quedado la sangre
como una hoguera
de sonoras guitarras
pero sin huellas
y esta noche
que se hunde
sobre mi cama
ardiente pero fria,
amante y solitaria
hasta volverme negra
sobre el hastìo arrastra
mi vendaval de luces.
lucièrnagas pirañas
y me deja sin sombra
bloqueada por el dia,
aurea en la pesadez
brava pero vencida
de útopicas esquinas,
de voces vagabundas,
de sombras en caìda
de gritos y de vida
como una isla
prendida en el oleaje
de una làgrima
y le vino que me bebe
en el deseo de ahogarme
y el silencio que muerde
la humedad de mi carne.
Me ha quedado la sangre
como una hoguera
de sonoras guitarras
pero sin huellas
y esta noche
que se hunde
sobre mi cama
ardiente pero fria,
amante y solitaria
hasta volverme negra
sobre el hastìo arrastra
mi vendaval de luces.
lucièrnagas pirañas
y me deja sin sombra
bloqueada por el dia,
aurea en la pesadez
brava pero vencida
de útopicas esquinas,
de voces vagabundas,
de sombras en caìda
de gritos y de vida
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio